El Universo está formado por un gran número de cuerpos celestes que presentan distintas formas, tamaños y características. A pesar de sus diferencias, existe un denominador común a todo lo que hay en el cosmos: la materia. Nuestro planeta está formado por materia y, como todos los demás cuerpos celestes, tuvo su origen en los cambios de las propiedades de la materia. Estas transformaciones han sido continuas en el tiempo y ocurren gracias al efecto de la energía. Por ejemplo, la acción del calor del Sol sobre el agua de los océanos, provoca su evaporación. Podemos decir entonces que la energía puede hacer cambiar las propiedades de la materia. La energía se relaciona estrechamente con la supervivencia de los seres vivos en el planeta.
Un poco de historia
Desde los inicios de la humanidad, la utilización de la energía ha sido su motor de subsistencia. El descubrimiento del fuego proporcionó a los primeros seres humanos la posibilidad de calentar sus viviendas, cocinar sus alimentos y fabricar los rudimentarios utensilios.
Un poco de historia
Desde los inicios de la humanidad, la utilización de la energía ha sido su motor de subsistencia. El descubrimiento del fuego proporcionó a los primeros seres humanos la posibilidad de calentar sus viviendas, cocinar sus alimentos y fabricar los rudimentarios utensilios.
